La vuelta a casa.

Hola.

Pues se fuerón...Unos el domingo,con dirección hacia Córdoba.
Otros han partido hoy.

¿Y qué dejamos atras?.

Pues una cena de Noche buena realmente calida,con canciones,pelucas y sobre todo mi espectacular espada laser que me trajo el tió.

Me lo he pasado teta haciendo el Picachu con mi espada laser.

Aún nos queda Noche vieja con otra visita de Barcelona,esta vez canalla.

Con ella me esperan diferentes exposiciones(no le dicho nada,pero supongo que le gustará la ídea) y sobre todo mucha cañita y mucha tapita.

Yo me he quedado algo tristona,pero con un sarpullido en el cuello de los nervios que ahora salen al exterior y es que la vida vá tan rapido que estos días me he dado cuenta como han envejecido mis padres y como han perdido su autonomía,hemos disfrutado mucho los unos de los otros con interminables partidas al parchís pero también hemos tenido momentazos a lo Almodovar.

-Niña dónde está el café?.
-En el armario de arriba mamá.
-Y para qué lo pones ahí no ves que no llego?.Claro como no es mi casa,no me entero de dónde está nada.
-Juan vamonos ya para casa,que aquí lo único que hacemos es molestar
-Pero mamá,díme que quieres un café y yo te lo hago.
-Nada hija que me tienes harta y yo me quiero ír a mi casa con mi gato que ya estoy cansada

Mientras tanto mi padre me vá siguiendo por el pasillo preguntandome todo el rato si vamos a ír a caminar.

Y mis nervios cada vez más destrozados.

El amor hacía los padres es el único amor que pasa factura...pero particularmente a mí no me importa en absoluto.

Besos.